Cerveza, birra o beer, llámala como quieras, pero sin duda es una de las bebidas alcohólicas preferidas, tanto por el público fanisetero como el de nuestros queridos artistas, que se curran originales diseños de camisetas, expresando su gran amor por la cerveza. Como cantaría Lionel Richie, en su aparición en Los Simpsons, junto a Homer, cerveceame…cerceveame siempre….hasta el fiiiin.

Antes de nada, es bueno aclarar que no hacemos apología de beber alcohol y que somos conscientes de que el exceso es malo. Sin embargo, ya sabéis el dicho, una de vez en cuando no hace daño, el resto ya está en vuestras manos.

La composición de la cerveza

Para conocer mejor a nuestra bebida favorita, veamos de que está compuesta nuestro querido oro líquido:

• Lúpulo: De sabor amargo y estimulante del apetito.
• Malta: Proporciona hidratos de carbono, minerales, vitaminas y ácidos grasos.
• Agua: Su contenido es mayor que cualquier otro ingrediente.

Es baja en contenido calórico y puede satisfacer una parte de nuestras necesidades de potasio y fósforo. En el caso de la versión sin alcohol, tiene una buena dosis de vitaminas del grupo B. Recomendada para deportistas y aquellos que no quieren o no deben consumir alcohol.

Beneficios de la cerveza

La cerveza, como cualquier bebida alcohólica, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas. Nosotros preferimos centrarnos en las buenas. Si bebemos con moderación, los beneficios que nos proporciona al organismo son espectaculares:

• Es nutritiva: al estar fabricada con plantas y granos está repleta de nutrientes, además del lúpulo y el trigo, tenemos zinc, potasio y fósforo. Además de una buena dosis de fibra soluble que previene el tránsito lento y el estreñimiento al mismo tiempo que ayuda en la digestión.
• Previene enfermedades: según estudios, puede prevenir patologías causadas por el deterioro de las neuronas (Alzheimer, Mal de Parkinson). Podría reducir, además, la posibilidad de sufrir osteoporosis debido al silicio que contiene. Este mineral ayuda al crecimiento óseo y al fortalecimiento de los huesos, prevenir la aparición de cánceres, diabetes…
• Beneficia al corazón: Tu salud cardíaca estará protegida si bebes una cerveza de vez en cuando.
• Reduce el colesterol malo: Cuando bebemos cerveza ayudamos a la sangre a desprenderse de la grasa acumulada en las paredes de las arterias. Además de reducir el malo aumenta el bueno.
• Refuerza el sistema inmunitario en mujeres
• Prolonga la vida: No llegaremos al nivel de inmortalidad de Jordi Hurtado, pero si aumentaremos nuestra expectativa de vida, gracias a sus poderes antioxidantes.

Perfecta después de un duro día de trabajo o de deporte

La verdad es que, a parte de los beneficios ya comentados, el mejor de todos, sin duda alguna, es el de tomar una cerveza después de un duro día de trabajo, o bien después de hacer deporte de alto rendimiento. No hay momento más mágico y placentero. Y si la acompañas con unos buenos aperitivos y una charla amena con tu grupo de amigos o amigas, mejor que mejor.

Sabemos que os han entrado ganas de tomaros una cervecita después de leeros el post, pero antes, no te olvides de echar un vistazo a nuestras fanisetas dedicadas a la cerveza, solo tienes que seguir este enlace 😉 -> Fanibirras

Hasta la siguiente noticia fanisetera. Bye bye amig@s.